Hay una sensación rara, y es que parece que cada día que pasa se desata una nueva crisis económica, “tormenta” que por supuesto, ha dejado sus secuelas en el ámbito político y por supuesto, social.
¿QUÉ PASARÁ?
La economía sin rumbo (y el Gobierno también): Subas, marcha atrás y elecciones en puerta
La política argentina está convulsionada, sobre todo para el sector oficialista que contra viento y marea aspira a aplicar un duro plan económico en el país, plan que seguramente, muchos de ellos ni siquiera entienden. En el camino se encuentran con el juego político de la oposición, que presionando con fuerza ha logrado que el Gobierno dé marcha atrás alguno de sus proyectos. La aceptación de la gente en referencia a Cambiemos está cada vez más baja, pero del lado opositor tampoco se vislumbra un candidato que enamore. Con una elección presidencial el año próximo, el futuro político de la nación es incierto, en realidad, igual que ahora, donde ni siquiera los expertos coinciden en a dónde vamos a parar con el modelo actual, y como plus, sin propuestas viables de parte de la vereda del frente.
10 de octubre de 2018 - 21:06
El gobierno del presidente Mauricio Macri tiene una inmensa presión acuestas y se llama; cumplir lo pactado con el FMI, y esto conlleva sin dudas, a ejecutar un drástico plan económico que no deja contento a ninguno.
Pero la presión no es sólo económica, atrás de eso viene una enorme "bola" llamada política, específicamente oposición, que presiona cada vez más fuerte, y aprovechándose de las falencias del Gobierno, ha logrado que desde el oficialismo den “marcha atrás” a algunos de sus desdichados planes.
Este miércoles 10/10 por ejemplo, se conoció la noticia que de que el Gobierno de Mauricio Macri no pudo sostener el cobro de un adicional en la tarifa de gas para compensar a las productoras por la devaluación y anulará la medida.
"El gobierno ya comunicó que no seguirá adelante con la resolución 20/2018 de Energía que cobraba un retroactivo en la factura del gas. La mitad del gasto lo absorberá el Estado y la otra mitad las empresas, tal como propuso la UCR. Se alivia así el sacrificio de los usuarios", tuiteó Mario Negri, jefe del interbloque Cambiemos en Diputados, quien aseguró que fue ese el camino tomado por el Gobierno.
Por supuesto, la oposición festeja y sabe que a Cambiemos se le complicada cada vez más el escenario económico. Y es que por ejemplo, el Gobierno sólo pudo renovar el 64% de las Letes de ayer martes 09/09, por ende, se han encendido las alarmas de cara al último “súper martes”.
Y es que para el martes 16/10 que será el último gran desarme de Lebacs, el equipo económico enfrentará un gran desafío. El BCRA afrontará ese súper martes por $240 millones, dinero que está mayormente a cargo de las entidades bancarias.
Pero no todo es festejo. Por qué siguiendo con el tema “gas” la oposición ha tenido sus choques. Uno de los casos se registró esta tarde en el Senado, cuando se aprobó un proyecto de comunicación para recomendarle al Gobierno de la nación que elimine la resolución 20 de la secretaría de Energía que obliga a los usuarios a compensar a las distribuidoras por la devaluación del último semestre.
Esta comunicación generó “chipazos” entre dos senadores de peso, Pichetto y CFK, “es necesaria una ley que derogue la resolución, no se trata de frenar nada, no somos semáforos. Tenemos que tener pronunciamientos claros”, se quejó la ex presidente Cristina Fernández en plena sesión.
Pero realmente, los choques de la oposición sería lo menos preocupante para el Gobierno, que tienen adentro de su coalición a “la fiera” de Elisa Carrió, diputada que tienen que tranquilizar casi a diario para que no se siga fracturando Cambiemos.
Y es que no les conviene para nada, sobre todo cuando en tan solo dos meses arranca un nuevo año y es por demás, año electoral. Un 2019 donde tendrán que pelear contra el pesimismo y la decepción de los votantes. El objetivo de Cambiemos: cómo recuperar la confianza y ser reelegidos, que es por ahora, lo único de lo que se muestran seguros en lo que deciden: quieren ser reelegidos, porque en el ámbito económico y aun con el apoyo externo (FMI) parece que faltan al menos dos años para “arrancar” (recesión).