DÍAS DIFÍCILES DE THERESA MAY

Crisis británica por el Brexit (Y esto recién empieza)

Grave batalla en el Gobierno de Theresa May acerca del Brexit. Boris Johnson, cuando todavía era jefe de la diplomacia británica, dijo ante un grupo de campaña conservador -'Conservative Way Forward'- que el Ministerio de Economía (liderado por Philip Hammond) era “el corazón de los partidarios de la permanencia” en la Unión Europea e intentaba arruinar el Brexit. Las diferencias crecieron con el transcurso de las horas, y luego explotaron. Para quienes ambicionan recuperar las islas Malvinas siempre es una buena noticia que haya dificultades en el Reino Unido.

Las renuncias de David Davis y Boris Johnson ha empujado al Gobierno de la 1ra. ministra, Theresa May, a una crisis con sus votantes (que no son mayoría pero sí son ruidosos) que dicen desear un Brexit duro, que corte los lazos comerciales y políticos con la Unión Europea.

Según un sondeo de ORB International, el apoyo de los votantes a la gestión de May -en medio de la negociación sobre el Brexit- ha caído a 29%, su nivel más bajo desde noviembre de 2016. La aprobación a la gestión del Gobierno de la salida de la UE alcanzó su nivel más alto en la primera mitad de 2017, con el 55%.

El 56% de los consultados no confía en que May consiga el acuerdo adecuado y el 26% sí confía: "May ha perdido a su ministro para el Brexit pero también está perdiendo crecientemente la confianza de los votantes", dijo el director de ORB International, Johnny Heald.

En ese contexto difícil, Boris Johnson ha presentado su dimisión como ministro de Relaciones Exteriores británico, profundizando la crisis abierta tras la dimisión del titular del Brexit, David Davis: 2 ministros en menos de 24 horas, negándose a apoyar los planes de May para negociar una ruptura suave con la Unión Europea.

A última hora de la tarde del lunes 09/07, el Gobierno, ubicado en la famosa calle Downing Street, ha confirmado que el nuevo ministro de Exteriores será Jeremy Hunt, extitular de Sanidad, quien defendió la permanencia en la UE durante la campaña del referéndum que nunca debió hacerse.

Hunt será el responsable del Foreign Office tras la dimisión del estrafalario Johnson, quien discrepó con el plan de un Brexit suavizado.

En la reorganización del gabinete, Matt Hancock dejará Cultura, Medios de Comunicación y Deportes para reemplazar a Hunt en Sanidad, mientras Jeremy Wright, hasta ahora abogado general del Estado, tomará las riendas de Cultura, Medios de Comunicación y Deportes.

Con los nuevos nombramientos, May trata de cerrar una crisis de Gobierno que durante la jornada disparó los rumores sobre una posible moción de confianza contra ella como líder del Partido Conservador.

Las renuncias de Johnson y Davis se precipitaron después que May publicó una propuesta para negociar con Bruselas la creación de un “área de libre comercio” entre el Reino Unido y la Unión Europea (UE) tras la salida británica del bloque.

La estrategia obligaría a Reino Unido a respetar la normativa europea, sin participar en su creación. Traspasa las 'líneas rojas' marcadas por el sector euroescéptico del partido. En apenas 48 horas, ha quedado claro que la escenificación del consenso no fue más que un espejismo.

En la reunión en Chequers, la residencia de campo de May, Boris Johnson se refirió al plan de May como "una mierda", según el relato de algunos de los asistentes. Pero Johnson optó por no oponerse al documento durante la reunión.

De todos mods... "el consenso de Chequers ha tardado dos años en producirse y dos días en desvanecerse", se ha mofado Jeremy Corbyn, el líder laborista, en el Parlamento.

Cara visible del sector duro del Brexit, con un largo historial de desafíos a la primera ministra cada vez que esta se alejaba de los postulados más duros en el proceso de ruptura con la UE, Johnson hace tambalear a la 1ra. ministra.

Si al menos 48 diputados conservadores piden por escrito a Graham Brady, presidente del Comité 1922, el órgano que representa a los diputados tories sin cargo en el Gobierno, someter a votación a May, ella se enfrentaría a una batalla por el liderazgo, en la que Boris Johnson se perfila ya como uno de los potenciales candidatos.

Sin embargo, los rebeldes de Johnson no tienen garantías de que ganarían la moción, ya que la mayoría de los diputados del partido son partidarios de un Brexit suave y muchos consideran una locura arriesgarse a una crisis que podría acabar abriendo las puertas de Downing Street al laborista Jeremy Corbyn.

Pero la situación, con la salida de los 2 grandes pesos pesados del sector euroescéptico del Gobierno, obliga a preguntarse si habrá más dimisiones. Ahora el foco está en el ministro de Medio Ambiente, Michael Gove.

También renunció el adjunto de Davis, Steve Baker, ampliamente respetado por los diputados que apoyan el Brexit.

Jacob Rees-Mogg, el líder de un grupo de partidarios del Brexit en el bloque del Partido Conservador, ha señalado que no votaría el plan de May, acordado en Chequers, si fuera sometido a votación en el Parlamento.

Los partidarios del Brexit consideran que las propuestas de May dejan al Reino Unido "atrapado permanentemente como un Estado vasallo en la trampa legal y regulatoria de la UE".

Pero también es cierto que si no hubiese más renuncias que Davis y Johnson para el plan de May, que apunta a un Brexit "amigable con los empresarios" y una "zona de libre comercio para mercancías" con la UE, la 1ra. ministro terminaría ganando previsibilidad y oportunidad.

Las grandes multinacionales como Siemens, Airbus y BMW han pedido una relación estrecha con Reino Unido tras el Brexit.

La libra ha subido el lunes 09/07 después de que los inversores descontaran que la renuncia de Davis no hará peligrar a May para un "Brexit suave". No obstante, la retirada de Johnson es mucho más compleja por lo que él representa entre los conservadores.

Desde que la apuesta de May por celebrar elecciones anticipadas en 2017 hizo que su partido perdiera la mayoría parlamentaria, ella ha sido vulnerable.

Muchos conservadores no quieren que ella lidere el partido en las próximas elecciones del 05/05/2022.

May ha descartado repetidamente otro referéndum, pero unos 100.000 partidarios de la UE marcharon por el centro de Londres para reclamar al Gobierno que haya una votación pública final sobre los términos del Brexit.

En el referéndum del 23/06/2016, 17,4 millones de votantes (51,9%) respaldaron la salida de la UE, mientras que 16,1 millones de votantes (48,1%) apoyaron la permanencia... con un alto índice de inasistencia a la votación.

Es uno de los periodos más tumultuosos en la historia política reciente británica: 4 grandes elecciones en 4 años:

> el referéndum sobre la independencia de Escocia en 2014,
> las elecciones generales de 2015,
> el referéndum sobre el Brexit de 2016, y
> las elecciones anticipadas convocadas por May en 2017.

Cualquiera sabe que habrá más votaciones.