No sin polémica se inauguró el primer monumento a Mauricio Macri en el país. El busto del Presidente está en un pueblo del centro cordobés Villa Ascasubi, rodeado por las figuras de los ex presidentes electos en democracia desde 1983.
CÓRDOBA
Polémica incluida, intendente K inauguró el 1er. monumento a Macri
Mauricio Macri ya tiene su primer monumento, ubicado en el pueblo cordobés Villa Ascasubi. Y hay dos hechos curiosos al respecto: por un lado, la Ley Orgánica Municipal 8102, vigente en Córdoba, establece que "las municipalidades no podrán levantar estatuas ni monumentos a personas vivientes", por lo cual se estaría violando la norma. Por otra parte, resulta llamativo que el busto haya sido inaugurado por una intendente kirchnerista, Zully Fonseca.
Villa Ascasubi, en el departamento Tercero Arriba, inauguró este domingo la Plazoleta de la Democracia. Resulta llamativo que el busto fue inaugurado por la intendente kirchnerista Zully Fonseca, quien explicó que fue una idea conjunta compartida con su marido, Fernando Salvi, actual legislador provincial. Ambos son reconocidos militantes kirchneristas. La mujer sucedió en la intendencia a su esposo, quien es legislador por el bloque Córdoba Podemos, ligado al Frente para la Victoria.
Fonseca dijo a La Voz que “la idea fue reconocer y homenajear a quienes fueron elegidos por el voto popular, más allá de las ideologías o políticas partidarias”.
Pero la polémica surgió específicamente porque violaría la ley provincial. La Ley Orgánica Municipal 8102, vigente en Córdoba, en su artículo 3, establece que "las municipalidades no podrán levantar estatuas ni monumentos a personas vivientes, ni darles el nombre de las mismas a las calles, avenidas, plazas, paseos ni lugares públicos".
Respecto a si las normas vigentes en Córdoba no permiten construir monumentos a quienes aún están con vida, la intendente respondió con el ejemplo, aunque en Buenos Aires, de cuando Cristina Fernández homenajeó a Raúl Alfonsín en vida, con un busto a su reconocimiento en Casa Rosada.
Luego acotó, con claro desconocimiento de la norma, que en Córdoba “lo que no se puede es instituir con nombres de calles o de plazas” a personas en vida.