CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). "La situación es grave por la pérdida generalizada de rentabilidad, tanto en producción agrícola como en ganadería", explicó Jorge Chemes. Luego, él agregó: "Precisamente, la ganadería podría estar recomponiendo su stock de cabezas pero gana la incertidumbre, que provoca desánimo".
FUERTE BAJA EN LA RENTABILIDAD AGROPECUARIA
"Lo peor está llegando: el desarraigo y la explosión social del campo"
Entre su ignorancia acerca del tema, su desdén por la inversión de riesgo y el odio por el conflicto 2008 que ganaron los productores, la Administración Cristina ha seguido hundiendo al campo. ¿Cómo se defiende el campo? Reduciendo su inversión, pero eso es más impotencia que fortaleza porque todos saben que el negocio del campo es producir todo lo que se pueda. La situación es muy complicada explican en provincias de fuerte presencia rural como Entre Ríos.
09 de septiembre de 2014 - 13:36
Jorge Chemes es el titular de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer). Ex agrodiputado nacional, de militancia política independiente aunque por motivos operativos permaneció en el bloque de la UCR, donde mantuvo fuertes discrepancias en temas del campo, es productor lácteo, tambero que le dicen.
Precisamente él recuerda los números: el litro de leche que en las góndolas de los supermercados se vende a $12,0, remunera al productor entre $2,70 y $2,93. Un tema de nunca acabar: la rentabilidad es de los intermediarios, del Estado impositivo y otros protagonistas de la cadena de comercialización, nunca del productor.
Chemes recuerda un momento muy ajetreado de su actividad como gremialista agropecuario: la Mesa Nacional de Productores de Leche: "Nunca conseguimos sentar a los supermercadistas. Una vez vinieron pero al rato se dijeron agraviados y se fueron para nunca más volver".
A su lado, Esteban Vitor afirma: "El productor grande todavía tiene alguna financiación pero el pyme no y ahí aparece el problema que nos preocupa hoy día: el desarraigo".
Según Vitor, "el problema hoy día es social. La familia se desmembra, la chacra o el campo se vende y ¿quién compra? O un productor más grande, que no es de la zona, o un político. Por un lado, concentración; por el otro, el nuevo dueño ya no le compra a los comerciantes del pueblo, y así se extiende la mancha de aceite".
Chemes, desde Chajarí, al inaugurarse una nueva edición de la Expo Rural, advirtió: “Las economías regionales que han hecho florecer a los pueblos del interior hoy atraviesan una profunda crisis, que arrastra a todos. Nosotros, que vivimos y trabajamos en el campo, sabemos que cuando nos va bien, gana el farmaceútico, la estación de servicio, y el almacén. Hoy toda esta cadena se está empobreciendo con nosotros, ante la mirada indiferente del gobierno que nos empuja”.
Difícil no recordar lo que afirmó Miguel Schiaritti, presidente de la Cámara de la Industria de la Carne (CICCRA): "Nuestra industria, por cada puesto directo, genera 7 indirectos. Al haber sufrido tantos cierres y perderse tantos empleos, esto fue un duro golpe para muchísimas localidades del interior del país".
Esteban Vitor (director de la Sociedad Rural de Entre Ríos, designado desde que Luis Miguel Etchevehere llegó a la conducción nacional). Vitor militó en Recrear, el partido de Ricardo López Murphy (nunca será reconocido como el partido de Esteban Bullrich o de Pablo Walter), y luego pasó al PRO.
4ta. generación de productores agropecuarios, co-fundador de la Sociedad Rural de Diamante y de la de Islas, es abogado especializado en Derecho Agrario, fue profesor universitario en la Universidad Nacional del Litoral (UNL), en la cátedra de Derecho Agrario.
Chemes coincide: "Lo notamos en la lechería: hay un proceso de concentración que apunta a la integración vertical de la industria. Ojo, nosotros intentamos en algún momento sumarle valor agregado a nuestra producción pero no es tan fácil financiar, en especial la etapa del supermercado, donde exigían desde estar gratis (para el supermercado) un tiempo en las góndolas hasta la extensión de los plazos de pago o te obligaban a descontar los valores en una mesa de dinero de los dueños. Hay que tener espaldas para competir en ese mercado".
Vitor apunta: "Hay una complicación de costos, pérdida de valor del tipo de cambio para el productor, descenso del precio internacional y restricción de la financiación. En el caso del maíz, me atrevo a afirmar que hoy día no es rentable una producción inferior a las 1.000 hectáreas. En el caso de la soja, hay que ver la distancia respecto del puerto más cercano y si hay ferrocarril o sólo se saca por camión. Las cooperativas ya están pidiendo las escrituras de los campos a los productores que buscan refinanciar".
Habrá que recordar el relevamiento del IERAL (Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana, dependiente de la Fundación Mediterránea): sobre un muestreo de 17 producciones clave de diferentes provincias, 15 de ellas trabajan con un tipo de cambio real menos ventajoso que el que tenían a comienzos de año.
Y un informe de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) revela que 8 de cada 10 productores de alimentos de provincias como Salta, Catamarca, La Rioja, San Juan y Mendoza, sufrieron un "fuerte deterioro en sus niveles de rentabilidad en el último año" porque "a los fenómenos climáticos adversos, se sumó el aumento de los costos internos por la inflación en dólares y la elevada presión impositiva que sufren las economías regionales".
Por si faltara algo, "La no resolución del conflicto con los holdouts incide en el ambiente de negocios de todas las actividades sectoriales pero, en especial, en las economías regionales", advirtió Carolina Schuff, economista de la consultora Abeceb.
Desde la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec), afirmaron que en Villa María, una importante cuenca lechera, "cada 15 días hay remates de tambos".
Según registros de la Sociedad Rural, en los últimos 10 años se perdieron 7.000 establecimientos. Pero los productores de aceitunas y de aceite de oliva, actualmente conviven con un tipo de cambio muy por debajo del promedio de 2006 y que resulta menos conveniente que el que tenían post devaluación.
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Chemez y Vitor recuerdan la mayor presión impositiva provincial que les aplicó el gobernador Sergio Urribarri en diciembre de 2013, con la excusa de que había que conseguir recursos extraordinarios para pagarle a los policías en rebelión por un problema salarial. Urribarri se quedó con el dinero y nunca concedió el incremento pactado.
Aquel asunto fue un bochorno: a Diputados de la Provincia el proyecto ingresó a las 5:30 y fue aprobado a las 6:00; al Senado provincial ingresó a las 12:00 y fue aprobado a las 12:30. Luego de la votación, un legislador pidió copia del proyecto "de curioso nomás. Quiero saber qué carajo voté".
La presión impositiva sobre el campo entrerriano es brutal. El impuesto Inmobiliario Rural en un campo en el territorio Victoria-Diamante, paga un promedio de $400 por hectárea pero en la bonaerense Pergamino, tributa $280, en la santafecina Venado Tuerto paga un máximo de $220; en la cordobesa Río Cuarto, $180...
Vitar explica: "¿Y qué obtiene el productor a cambio del sacrificio que hace para estar al día con los impuestos? Si cada día descubre que el Estado está peor gestionado, hay mucho gasto inútil, mucho dinero malgastado y un gran menosprecio hacia la inversión de riesgo que hace el campo..."
La situación es dramática, en general. Etchevehere advirtió días atrás que desde el inicio de la gestión kirchnerista "se perdieron 10 millones de cabezas de ganado, hay 14.000 ganaderos menos, 135 frigoríficos cerraron sus puertas y se destruyeron 15.000 empleos".
Chemes reclamó a los productores ser protagonistas de las soluciones: "Esta década ha sido un tiempo de bonanza desperdiciado porque frente a condiciones inmejorables que nos hubieran favorecido a todos; a los que producen y a los que quieren que el país despegue, el gobierno le ha dado la espalda al mundo y a los que trabajan".
La Cámara de Senadores de la Provincia convocó formalmente a la Mesa de Enlace de Entre Ríos para hoy martes 09/09, con “agenda abierta”. El presidente del bloque, Enrique Cresto, dijo que el objetivo era “simplemente escuchar” a las entidades del campo, cuando la Mesa de Enlace anunció una serie de reuniones con los legisladores de cada departamento municipal.
Vitor explicó: “Igual seguiremos manteniendo los encuentros que veníamos manteniendo en cada departamentos”.
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