JUICIO SOBRE TRATA DE PERSONAS

Cómo vender una sobrina como prostituta y declararse inocente

El hecho ocurrió en mayo de 2008, y según estableció la justicia, ocurrió que una joven menor de edad fue engañada por su prima Verónica de Jesús Olivera, quien la llevaba a la localidad de Puerto San Julián (Santa Cruz) para, presuntamente, obligarla a ejercer la prostitución. En este momento transcurre un juicio oral y público ante los jueces Alicia Noli, Carlos Enrique Jiménez y Gabriel Eduardo Casas, en San Miguel de Tucumán. Olivera afirmó, en su declaración, que la joven viajaba por su propia voluntad a Santa Cruz porque se había peleado con sus padres, y que nunca le prometió un trabajo a su prima. Pero el argumento se cae porque también declaró que no conocía a la otra acusada, la santacruceña Ana Alicia Taviansky, dueña de un cabaret. El cruce telefónico demostró que sí se conocían.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Es una historia de putas en San Julián, Santa Cruz. Y transcurre cuando se encuentra en cartel la obra "Las putas de San Julián" (de gira por las provincias de Santa Fe, Santa Cruz y Buenos Aires), versión libre de Rubén Mosquera sobre un episodio de "La Patagonia rebelde", de Osvaldo Bayer, que recupera la historia de 5 mujeres de un prostíbulo de Puerto San Julián, provincia de Santa Cruz, llamado “La Catalana”, que se negaron a atender a los "milicos" que reprimieron a los trabajadores, los ejecutaron y enterraron en fosas comunes.
  
Y esta historia siglo 21 comenzó cuando no había pasado ni siquiera un mes desde que la Ley de Trata de Personas había sido promulgada, cuando la madre de una joven de 17 años denunció que su hija estaba siendo trasladada por su sobrina al sur del país, para que ejerciera la prostitución.
 
La norma fue promulgada el 29/04/2008, y la denuncia de secuestro de la joven ocurrió el 21/05/2008.
 
Por ello intervino en el caso el jefe de la división Trata de Personas de la Policía de Tucumán, Julio Fernández, quien afirmó ante el tribunal que cree que el caso no sólo es el 1er. debate oral que se realiza en la provincia en el marco de la nueva legislación, sino que constituye uno de los primeros casos del país investigado bajo la figura de trata de personas con fines de explotación sexual.
 
“Para nosotros fue un logro muy grande. Recién se había creado el delito de Trata de Personas, y logramos rescatar a esta menor que estaba siendo llevada a Córdoba. La investigación nos permitió conocer que había una red que conectaba Tucumán, Córdoba y Santa Cruz”, describió el comisario Fernández.
 
Antes que él ya había declarado Ana Alicia Taviansky -acusada del delito de trata de persona-, quien insistió una y otra vez que su prostíbulo de Puerto San Julián, era legal y que no podían cuestionarle la actividad que allí se realizaba. 
 
Ella fue detenida acusada de haber sido el contacto de Verónica del Jesús Olivera –prima de la víctima – para recibir a la adolescente de 17 años en su burdel. Oriunda de Comodoro Rivadavia (Chubut), Taviansky se presentó como jubilada ama de casa, dueña del local nocturno “Cabaret San Julián” ex “El Lobito”.
 
“Es una casa habitual en este tipo de negocios. Las chicas que venían a trabajar se quedaban a dormir los primeros días, hasta que juntaban algo de dinero para alquilarse un departamentito”, explicó la “madama” apodada "Samantha". 
 
Sin embargo, al rato aclaró que las mujeres no vivían en el negocio.
 
En 2008, cuando se inició la investigación, en el cabaret trabajaban entre 12 y 14 mujeres. El local abría todos los días de 23:00 a 6:00 (el horario, dijo la acusada, estaba establecido en una resolución municipal). Todos los 20/12 cerraba sus puertas, y volvía a abrir el 01/02.
 
Soy una mujer viuda, puedo ir para donde quiera”, respondió, cuando la fiscala ad hoc Valentina García Salemi le preguntó si conocía La Rioja y otros posibles destinos prostibularios.
 
La acusada continuó explicando cuál era la actividad que se realizaba en el “Cabaret San Julián”, negando que allí haya habido prostitución. “Es un salón y las chicas son alternadoras. Toman copas con los clientes, les preguntan qué van a tomar, les cobran lo que van consumiendo. Tengo unas tarimas con caños donde se hacen shows. Pero no hay arreglos de tipo sexual”, describió Taviansky.
 
El “Cabaret San Julián” abrió sus puertas en 1999 hasta 2014, dijo la imputada. García Salemi le preguntó si las mujeres que trabajaban en el negocio viajaban desde otras provincias. “Me abstengo de contar de dónde vienen las chicas”, respondió Taviansky. 
 
Más tarde aseguró que las chicas eran de otra provincia y que quienes llegaban hasta su local habían trabajado en otro local de Santa Cruz, sobre todo en “Las Casitas”, la conocida zona de Río Gallegos cuyos prostíbulos fueron cerrados en 2009.
 
Según Taviansky, en Puerto San Julián, funcionaban unos 5 “cabarets”. “En este momento no quedó ninguno. Cambiamos la patente y somos un pub”, explicó ella.
 
La fiscala García Salemi preguntó: “Pero ¿qué se hace en el pub?”. 
 
“Pool, confitería. Me voy a abstener de contestar cómo funciona el negocio”, dijo Taviansky, haciendo uso de su derecho a no contestar algunas preguntas.
 
Al final, fastidiada, le dijo a los jueces: “No voy a seguir declarando”, y volvió al banquillo de los acusados.
 
¿Qué dijo el comisario Fernández?
 
En las próximas audiencias del juicio deberán incorporarse las pruebas que conectan a Verónica de Jesús Olivera (la mujer que trasladaba a su prima adolescente) con Ana Alicia Taviansky (propietaria de un prostíbulo en Puerto San Julián, provincia de Santa Cruz). 
 
Pero él anticipó: “La conexión era vía Córdoba. Se demostró que los pasajes que le enviaron a Olivera habían sido comprados en Río Cuarto. Para despistar se habían planificado rutas cortas: Tucumán-Córdoba, Córdoba-Río Cuarto y Río Cuarto-San Julián”, explicó el jefe de la división Trata de Personas.
 
“Los cruces telefónicos permitieron demostrar que Taviansky estaba comunicada con Olivera para que llevara a la menor”, afirmó Fernández. Además, los pasajes que se habían comprado estaban a nombre de Olivera y de la hermana mayor de edad de la víctima. El DNI y la partida de nacimiento de las 2 hermanas estaban en poder de Olivera cuando la detuvieron en Córdoba, en el momento en el que la joven fue rescatada.