CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Previo al partido que disputaron Quilmes y All Boys por el encuentro que correspondió a la séptima fecha del Torneo Final 2014, dos facciones de la barra brava del ‘Cervecero’ se enfrentaron en la tribuna ‘Centenario’ a golpes de puño y peleas cuerpo a cuerpo con armas blancas para disputarse el liderazgo de la hinchada del club. Las primeras informaciones mencionan que hubo 10 heridos, un apuñalado y dos internados en grave estado. Tras el enfrentamiento hubo dos detenidos, según un informe policial.
INCIDENTES EN QUILMES
Todo mal para Aníbal Fernández: Quilmes en descenso y guerra de barras
Antes de que se pusiera en marcha el partido que disputaron, este lunes (10/03) Quilmes y All Boys por el encuentro que perteneció a la séptima fecha del Torneo Final 2014, un grupo de barras bravas del club ‘Cervecero’ se enfrentaron a golpes de puños y armas blancas en la tribuna Centenario. Las primeras informaciones indican que el enfrentamiento se atribuye a las dos facciones de la barra que lideran 'La Barra de Ramiro' y ‘Los Álamos’ que luchan por el liderazgo de la hinchada cervecera.
La batalla, que duró 10 minutos, no se convirtió en una tragedia por la rápida intervención de la policía aunque luego existieron corridas en las adyacencias del estadio Centenario.
La pelea interna de la barra brava de Quilmes se atribuye a la ‘Banda de Ramiro’ y la facción de ‘Los ‘Álamos’. Banda de Ramiro, aparentemente ya estaba instalada en el medio de la popular, cuando hizo su ingreso la gente de ‘Los Álamos’ para pelear y disputar del poder de la hinchada.
Unos de los hechos más resonantes que involucra a la banda de ‘Los Álamos’ data de 2012 durante el partido de reserva entre el Cervecero y Unión, cuando ingresaron con el cajón del hijo muerto de su jefe, a los tiros, para velarlo.
Todo ocurre en la institución que dirige el senador kirchnerista Aníbal Fernández, quien hasta el momento no se pronunció sobre estos hechos. Encima All Boys ganó y además de salir de la zona de descenso, hundió a Quilmes allí.
Algo similar había ocurrido a principios de 2011, cuando este mismo grupo ingresó con el cajón del otro hijo del jefe de la barra brava, al campo de juego. Esta vez fue en la popular local, pero sorprendieron ingresando a los tiros, en pleno partido. "Tiraron un par de tiros, buen cagazo me pegue, estaban atrás del arco donde yo estaba", dijo en su cuenta de Twitter Joaquín Papaleo, arquero de Unión.
El árbitro había suspendido el partido por unos minutos, pero luego los hinchas abandonaron la popular y las cosas siguieron con normalidad, como si nada hubiese ocurrido. "Mientras jugábamos contra Quilmes, entró un montón de gente con un cajón, tuvieron que parar el partido, se quedaron un rato y se fueron", contó el arquero de Unión.
Se trata del hijo del jefe de la barra "Los Alamos", de un barrio en los alrededores del estadio de Quilmes, que pelea por quedarse con el poder de la popular. Y lo más importante: tenían la autorización para hacerlo: "Nos habían dicho que estaba estipulado en el entretiempo, por suerte no pasó nada en el campo de juego", comentó el técnico de Unión, Horacio Humoller, según reproduce el diario Olé.
El hijo de José María, el líder de esa facción, murió en un accidente tras chocar con la moto, cuando era perseguido por la policía tras robarle a una pareja.
Ramiro Bustamante, de unos 32 años, conductor de la barra brava de Quilmes desde 2010, fue detenido en agosto de 2011 junto a su esposa por personal de la seccional 3ª de Quilmes, acusado de ser uno de los integrantes del grupo que a principios de ese mes asaltó un lavadero. Bustamante tenía en su haber dos pedidos de captura previos, emanados de la Justicia de Lomas de Zamora y también vinculados con la figura de robo calificado. Las actuaciones fueron derivadas a la Fiscalia Penal N° 10 del Departamento. Judicial de Lomas de Zamora. Tiene vínculos en el Partido Justicialista de Quilmes. Aníbal Fernández, senador nacional y presidente del club, negó tener relación con él.
El 27/04/2013, un enfrentamiento entre las dos facciones de la barra de Quilmes había dejado cinco heridos de bala, uno de ellos de gravedad. El hecho se había producido minutos antes de que emprendieran el viaje hacia el Monumental para presenciar el partido frente a River Plate.
Uno de los cinco heridos había llegado al hospital de Quilmes en grave estado, producto de “un tiro en el pómulo”, mientras que una persona que estaría ajena a esa interna había sufrido un paro cardíaco y había sido derivada al mismo centro de salud.
El episodio se había producido en la intersección de las calles Guido y Sierra, de Quilmes, minutos antes de que el grupo que lidera la barra del “cervecero” partiera rumbo al Monumental.
Una fuente había señalado que la interna se había desatado por “la concesión de los puestos de choripán en la ciudad, no sólo en la cancha”, y que el tiroteo fue “el vuelto de lo que ocurrió en la semana”.
El jueves 25/04/2013, las dos facciones de la barra se habían enfrentaron en avenida La Plata y Laprida, en las cercanías de un lavadero de autos cuyo propietario sería Osvaldo “Dedo” Becerra, ex líder de la hinchada, cuando el grupo comandado por Ramiro Bustamante, actual jefe de la tribuna, fue a reclamarle que entregara el control sobre los puestos de choripán, panchos y merchandising ilegal del club en distintos puntos de la ciudad.
En relación a este nuevo episodio y si bien el encuentro se disputó, con la cabecera local despoblada, el informe del árbitro Andrés Merlos podría derivar en la suspensión del estadio Centenario, de cara al partido con Boca Juniors por la 9na. fecha del certamen.