YA SON 7 LOS MUERTOS
Crucero: Una llamada complica al capitán
Una conversación telefónica confirma que el capitán abandonó el crucero. Además, los equipos de rescate encontraron un séptimo cadáver al reanudar esta mañana las tareas para encontrar sobrevivientes
17 de enero de 2012 - 00:00
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Conforme transcurren las horas, se van conociendo más detalles acerca de la noche fatídica en la que el crucero Costa Concordia naufragó.
Por un lado, según informa el diario italiano La Stampa, los equipos de rescate encontraron un séptimo cadáver al reanudar esta mañana las tareas para encontrar sobrevivientes. Las víctimas fatales ya ascienden entonces a 7, mientras el número estimado de desaparecidos se elevó a 28 personas.
Por otro lado, la responsabilidad del capitán es otra de las claves. Los dueños del lujoso crucero acusaron a su capitán Francesco Schettino de causar el desastre del viernes tras virar el barco demasiado cerca de la costa, donde golpeó contra una roca, en un audaz "saludo" a los residentes de la isla de la Toscana, en la costa mediterránea italiana.
Schettino fue arrestado el sábado acusado de homicidio involuntario y de abandonar el barco antes de que todos hubieran sido evacuados y está previsto que hoy se presente ante los jueces para ser interrogado. Los fiscales dicen que el capitán también se negó a regresar a bordo cuando se lo pidió la Guardia Costera.
Una conversación telefónica entre el capitán del crucero Costa Concordia y la Capitanía de Puerto publicada hoy en la prensa italiana revela que este abandonó el barco antes de que se evacuara a todos los pasajeros y no volvió a pesar de que se le ordenó regresar.
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Los principales medios del país itálico transcriben varias conversaciones entre el capitán Francesco Schettino y la Capitanía de Puerto que confirman además que se ocultó también el motivo del naufragio.
A las 21.54, hora local, con el barco ya encallado frente a las costas de la isla del Giglio, escenario del desastre, el capitán aseguraba que todo estaba bien y que se había tratado de un problema técnico.
Según publica Corriere della Sera, la Capitanía preguntó a Schettino a las 00.32, hora local, cuántas personas quedaban a bordo, y aunque la nave estaba aún llena el comandante respondió que solo unas 200 o 300.
La respuesta hizo levantar sospechas a la Capitanía que le preguntó si aún estaba a bordo, y Schettino confesó que el barco se estaba inclinando y lo había abandonado. "¿Pero cómo qué ha abandonado la nave?", preguntaron desde la Capitanía.
Aunque el capitán se retractó y dijo que no había abandonado el crucero, desde la Capitanía no le creyeron. "Vuelva inmediatamente a bordo, suba por la escalera de seguridad y coordine la evacuación. Debe decirnos cuánta gente hay todavía allí: niños, mujeres, pasajeros, el número exacto de cada categoría", añadieron.
"Comandante, es una orden, ahora mando yo. Antes ha declarado que ha abandonado el barco, vuelva a la proa y coordine el rescate porque ya hay muertos", le exigieron.
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Schettino que ya se encontraba en tierra firme y que nunca regresó a la nave, según los investigadores, preguntó cuántos cadáveres había. "Es usted quien me tiene que decir cuántos. íQué quiere hacer! ¿Irse a casa? Vuelva inmediatamente arriba y diganos lo que hay qué hacer, cuántas personas quedan y lo que necesitan", ordenaron desde la Capitanía.
El comandante aseguró que volvería, pero tanto testigos como los investigadores que llevan el caso, afirman que nunca volvió y que lo vieron tomar un taxi hacia un hotel.
El naufragio se debió, según confirmó ayer la compañía naviera Costa Cruceros, a un "error humano" del capitán que acercó hasta unos 150 metros de la costa de esa pequeña isla del mar Tirreno y en la maniobra impactó con un escollo.
Un equipo de buceadores localizó cadáveres atrapados en la popa del barco, continúa la búsqueda en el casco semihundido del crucero.
Un agente de la Guardia Costera italiana dijo a la agencia Reuters que el número de personas desaparecidas se había revisado al alza a 28 pasajeros, lo que demuestra el gran desconcierto que aún rodea al siniestro. Otra fuente marítima dijo más tarde que 10 alemanes podrían estar entre los pasajeros desaparecidos.
El barco de 114.500 toneladas, uno de los transatlánticos de pasajeros más grandes en sufrir un siniestro, se fue a pique tras chocar con una roca en el momento en el que se servía la cena, el viernes por la noche. Rápidamente volcó sobre un costado, dejando al descubierto un gran agujero por debajo de su línea de flotación.