INSÓLITA PROPUESTA DE UN EMPRESARIO AMIGO DE MACRI

Caputo atenta contra el PRO: El caso Braun

El constructor Nicolás Caputo no es funcionario público en la Ciudad de Buenos Aires. Pero influye más que cualquiera. Su poder es la amistad con Mauricio Macri. Él fue asesor de Macri durante algunas horas pero ante el escandalete renunció, lo que no impidió que su poder se mantuviera al punto que cuando Macri viajó a Francia, varios funcionarios se reportaban en las oficinas privadas de Caputo. Pero comete errores...

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Nicolás Caputo es el poder detrás de Mauricio Macri. El electorado porteño nunca lo votó y probablemente nunca lo haría, pero Caputo se encuentra detrás de muchísimas decisiones del Gobierno porteño. 

 
Cuando en el Ejecutivo porteño se habla de "Niki" es casi tan importante como cuando se dice "Mauricio". Pero a Mauricio Macrí sí lo votó el electorado porteño. Caputo es una mochila que vino oculto en el 'pack Macri'.
 
Caputo es un hombre de negocios, hábil en la industria de la construcción y también se ha diversificado hacia otras actividades como la energía eléctrica. Su lógica empresarial es ágil y habitualmente correcta. Pero discrepa, a menudo, con la lógica política. Los buenos deseos de Caputo pueden provocarle daño a Macri, al PRO, e inclusive a quien él quiere beneficiar.
 
Hay un caso muy concreto que se comenta por estas horas: Miguel Braun.
 
Director de la Fundación Pensar, tan vinculada al proyecto del PRO, Caputo quiere a Braun en el directorio del Banco Ciudad de Buenos Aires.
 
Es cierto que Braun tiene cualidades para ello, y es un buen economista. Pero también es verdad que integra 1 de las 3 familias accionistas del Banco Galicia.
 
Caputo quiere promover a Braun pero no debería comenzar por el Banco Ciudad, porque, con esa decisión, puede provocarle un problema al propio Brown, al Banco Galicia y a Macri.
 
3 legisladores opositores (1 del Frente para la Victoria, 1 de Proyecto Sur y 1 entrante por el FAP) ya le hicieron llegar mensajes al PRO que si siguen adelante con el tema, realizarán las denuncias correspondientes y agitarán el tema.
 
Nada de eso le conviene al correcto Braun. Tampoco al resto de la conducción del Banco Ciudad, que ya tiene suficientes temas pendientes en especial en lo sindical, y menos a Macri. Ni hablar del Galicia, que no precisa nada de la gestión futura de Braun. Solamente le conviene a Caputo y su deseo de resolver cuestiones que quedaron de la campaña proselitista.
 
Pero debería esforzarse por razonar desde la política, al menos cuando se trata de aconsejar a su amigo Macri, quien precisamente se desempeña, desde hace algunos años, en rol de político profesional.