LO MANDARON PARA SU CASA

Tsonga eliminó a Nadal del Masters de Londres

El español Rafael Nadal, Nº 2 del mundo, perdió con el francés Jo-Wilfried Tsonga y quedó eliminado de la Copa Masters, uno de los pocos grandes torneos que sigue sin poder conquistar el ex rey. En tanto, el suizo Roger Federer venció al estadounidense Mardy Fish y obtuvo fácil el Grupo B.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) El francés basó su resonante triunfo, que le llevó dos horas y 42 minutos de juego, en su fortaleza para mantenerse a la par de su rival en sus buenos momentos y en su ambición para ir por más en cuanto vio la oportunidad: pese a haber cometido más errores no forzados y dobles faltas en momentos clave, saco una importante ventaja con sus aproximaciones a la red y aces.

Rafael Nadal, finalista el año último en Londres, donde fue superado por Federer, intentó dar batalla pero cayó ante el ofensivo y punzante Tsonga (6º del ránking de la ATP) por 7-6 (7-2), 4-6 y 6-3, en dos horas y 42 minutos de juego en la cancha rápida y cubierta del O2 de Londres.

El español encontró en Tsonga a un rival durísimo, que sólo le dio opciones al seis veces campeón de Roland Garros en detalles puntuales, como las imprecisiones que le permitieron a Nadal hacerse con un apretado segundo set.

El mallorquín llegaba este año a Londres con dudas sobre su estado físico, después de tomarse varias semanas de descanso para recuperarse de lo que ha calificado en repetidas ocasiones como una temporada muy larga.

Nadal se enfrentará ahora al último compromiso del año, la final de la Copa Davis, que España jugará contra Argentina, en Sevilla, aunque sobre arcilla, dentro de una semana.

El número dos del mundo se medía a Tsonga con la estadística de su parte, pero perdió contra él en Londres por tercera vez en su carrera, de las nueve en las que se enfrentaron.

El francés está cumpliendo una de sus mejores temporadas en el circuito ATP, en la que eliminó de Wimbledon a Federer en los cuartos de final y se adjudicó los torneos sobre pista dura de Metz y Viena, en esta recta final del año.

Consciente de las dificultades que iba a plantearle su rival, Nadal saltó a la cancha dispuesto a ponerle presión sobre Tsonga y demostró desde el primer minuto que era capaz de devolverle sus saques al francés, que guarda en el servicio una de sus mejores armas.

Tsonga se presentaba este año por segunda vez en la Copa de Maestros, después de caer en la primera ronda en 2008, y dejó traslucir algunos nervios en los primeros compases del encuentro, cuando golpeaba con fuerza pero erraba algunos tiros.

El francés insistía en enviar bolas al lado derecho de Nadal, esperando el fallo del español en el revés, mientras que el número dos trataba de disparar hacia los laterales de la pista para evitar que su rival pudiera utilizar toda su potencia en golpes rectos.

El español buscaba los puntos largos, pero el francés rehuía el diálogo y trataba de amarrar los intercambios cuanto antes con bolas potentes, o bien con drops que obligaban al número dos a correr hacia la red. Tras una hora de partido todavía no se había decidido el primer set, que acabaría cayendo del lado del francés en el desempate.

En el segundo, continuó una igualdad en el marcador que parecía inamovible, y ninguno de los dos jugadores lograba distanciarse ni romper la iniciativa de su rival, a pesar de que tuvieron sus opciones de conseguirlo.

Habían pasado dos horas exactas de partido y ninguno de los dos contendientes había acertado una bola de ruptura, hasta que varios errores consecutivos de Tsonga en uno de sus turnos pusieron a Nadal en bandeja el sexto y definitivo juego del segundo parcial.

El partido dio un giro definitivo y aceleró su ritmo en un tercer set en el que el mallorquín se mostró demasiado impreciso y dejó espacio para que Tsonga rompiera tres veces su servicio, hasta concluir en 6-3 en apenas 40 minutos.