El Gobierno de Bolivia advierte con demandar a Chile ante la Corte de Arbitraje si persisten los obstáculos al libre tránsito de carga por el puerto de Arica o si se suman otros con la posible concesión a manos privadas del ferrocarril Arica-La Paz, porque con ello —afirmó— se vulnera el Tratado de 1904.
SALIDA AL MAR
Bolivia demandará a Chile por el ferrocarril de Arica
Bolivia, determinada a conseguir una salida al mar para comerciar con China a través de Chile, amenaza nuevamente con acciones legales contra el vecino país aunque el Vicecanciller dijo que este proceso ante la Corte Internacional de Arbitraje es al margen de la demanda que se alista por una salida soberana al mar.
El Vicecanciller dijo que este proceso ante la Corte Internacional de Arbitraje es al margen de la demanda que se alista por una salida soberana al mar. La autoridad exigió que se respete el libre tránsito establecido en el Tratado de 1904.
El vicecanciller boliviano Juan Carlos Alurralde advirtió ayer que Bolivia puede llevar a un arbitraje internacional el caso de la administración del ferrocarril Arica-La Paz, que el viernes fue concedido a una empresa privada chilena.
La autoridad, quien el viernes denunció que esta medida adoptada por La Moneda viola el Tratado de 1904, referido al libre tránsito, y profundiza las diferencias diplomáticas con La Paz, explicó que el arbitraje es una demanda distinta a la que alista el Gobierno por los 132 años de enclaustramiento marítimo.
“Si el tema del monopolio sigue dificultando (el libre tránsito) que actualmente existe en el puerto (de Arica), y si es en el caso del ferrocarril (Arica-La Paz), el monopolio se amplía, y si siguen las regulaciones, cada vez más fuertes, que transgreden el espíritu del Tratado de 1904, probablemente tengamos que resolverlo en una instancia internacional, que será en la Corte de Arbitraje Internacional, tal cual manda el Tratado de 1904”, dijo Alurralde.
El Vicecanciller, no obstante, señaló que Bolivia cree en el poder del diálogo y que los pares chilenos deben sentarse para dialogar en un mecanismo formal y serio para resolver este tipo de asuntos.
Consideró que para resolver los conflictos ocasionados por la decisión del Gobierno chileno de entregar la administración, primero, del puerto de Arica a empresarios privados y, ahora, el ferrocarril Arica-La Paz al mismo grupo inversionista, creando un monopolio en esta área, se debe convocar a mecanismos de consulta.